Cualquier momento del año es bueno para visitar la ciudad histórica de Cáceres. Pasear relajadamente por el casco antiguo de la ciudad te transportará a gloriosas épocas pasadas, y si tienes la oportunidad de hacerlo de noche, disfrutarás de la cuidada iluminación que da prestancia a sus principales monumentos. Cáceres es, en definitiva, un increíble escenario real de película medieval que se despliega ante nuestros ojos. Por su excelente estado de conservación, la densidad de monumentos y la singularidad de su trazado urbano, fue declarado MONUMENTO NACIONAL en 1949 el conjunto amurallado con los edificios que contiene, la Plaza Mayor, en la que se pueden contemplar monumentos
tan emblemáticos como la Torre de la Hierba, la de los Púlpitos y sobre todo la Torre de Bujaco junto a la Ermita de la Paz, y otras construcciones extramuros.
El Consejo de Europa le otorgó en 1968 el título de TERCER CONJUNTO MONUMENTAL DE EUROPA; y desde 1986 ostenta el nombramiento de CIUDAD PATRIMONIO DE LA HUMANIDAD, concedido por la UNESCO. Cáceres cuenta, además, con otros galardones:
POMME D´OR AL MÉRITO TURÍSTICO, otorgado por la Federación Internacional de Periodistas y Escritores de Turismo en 1996; LES ETOILES D´OR DU JUMELAGE, concedido por la Comisión Europea en 1999; y el premio ARCHIVAL otorgado por la Asociación para la Recuperación de Centros Históricos en el año 2004.
Pero el legado histórico de Cáceres nos puede hacer retroceder en el tiempo aún mucho más con la presencia de pinturas rupestres del Paleolítico Superior y puntas de flecha, restos de cerámica del Neolítico en la Cueva de Maltravieso, estelas de guerreros de la Edad del Hierro; verracos - toros o jabalís - rastro de los vetones... De la colonia romana Norba Caesarina se conservan restos de muralla, el Arco del Cristo o Puerta del Río (una de las puertas), inscripciones y la escultura del Genio de la Colonia (mal conocida como Diosa Ceres). La ciudad fue fundada por un político y militar romano, Cayo Norbano Flaco (siglo I a.C.), siendo su patrono Lucio Cornelio Balbo (entre otras hipótesis). Más tarde, la ciudad fue sometida por Leovigildo en el siglo VI d C., pasando a manos visigodas. Pero no será hasta la dominación musulmana y sobre todo en época almohade cuando Cáceres se convierta en un importante enclave defensivo. Se reconstruye la muralla con torres y se levanta la alcazaba en lo que hoy son la plaza de San Mateo y la de las Veletas (actual Museo de Cáceres) con un impresionante aljibe.
Fue el rey leonés Alfonso IX en 1229, quien le otorgó un fuero tan favorable que hizo repoblar conflictivos territorios a cambio de tierras y privilegios. Familias procedentes del norte de España construyeron entonces gran parte de los palacios y casas fuertes en las plazas en torno a las iglesias de Santa María y de San Mateo. Muchos de estos edificios perdieron carácter defensivo con los Reyes Católicos para convertirse en símbolos de prestigio y de poder.
La visita a los distintos centros de interpretación y museos de la ciudad se hace imprescindible para desgranar la actual cultura y patrimonio histórico-artístico de la ciudad de Cáceres y la provincia. El museo de Cáceres (antiguo Museo Provincial de Bellas Artes), Sala de Exposiciones Permanente Municipal Ciudad de Cáceres, Museo Al Burch, Museo de la Concatedral, Museo de Artes Visuales Helga de Alvear y el Museo de Historia y Cultura Casa Pedrilla-Fundación Guayasamín, etc.